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Earl Lloyd: el pionero

21-09-2021

Frecuentemente olvidado al recordar los jugadores que han hecho historia a lo largo de la NBA, Earl Lloyd fue un pionero que cambió la historia para siempre.

Hoy os traemos la historia del primer hombre afroamericano que jugó en la NBA.

Inicios

Nacido en Alexandria, Virginia el 3 de abril de 1928, Lloyd creció en un Estados Unidos en plena segregación racial. Durante su etapa como estudiante de secundaria, Lloyd ya destacaba por encima del resto de sus compañeros como jugador de baloncesto, lo que posteriormente le valió para recibir una beca en la Universidad de West Virginia State, donde su entrenador de secundaria, Louis Randolph Jackson, se había graduado.

"En 1946 los chicos negros sabían muy poco sobre la universidad", recordó Lloyd. "Aunque tuve algunas otras ofertas de becas, donde el entrenador Jackson dijera que debía ir, yo iba a ir. No lo debatí, porque si la universidad podía hacerme la mitad del hombre que era mi entrenador, sería grandioso".

Ya en la Universidad, Lloyd mostró su gran talento para jugar al baloncesto. Pasó cuatro años en West Virginia State. Como senior, promedió 14 puntos y 8 rebotes por partido. En la 1947-1948 ayudó al equipo a terminar la liga invictos (30-0), siendo el único conjunto invicto del país. Ganaron el campeonato de la Central Intercollegiate Athletic Association (CIAA) en 1948, seguido por otro título en 1949.

Fue nombrado en el mejor quinteto de la conferencia en tres ocasiones, y dos veces All-American por el periódico Pittsburgh Courier, liderando a West Virginia State a un segundo puesto en la conferencia y torneo CIAA. En 1947-48, West Virginia State fue el único equipo invicto en Estados Unidos. Luego fue votado como uno de los 50 mejores jugadores en la historia de la CIAA, como así también su Jugador de la Década entre 1947 y 1956.

NBA

En 1950, Lloyd fue elegido con el pick 100 del NBA Draft por los Washington Capitols. Fue uno de tres jugadores afroamericanos que se unieron a la NBA en esa temporada.

Chuck Cooper, elegido con el 14° pick del Draft de 1950, se transformó en el primer jugador afroamericano en ser drafteado.

Nathaniel Clifton, quien comenzó su carrera jugando para los New York Rens y los Harlem Globetrotters, fue el primer afroamericano en firmar un contrato con un equipo NBA.

Apodado "The Big Cat" Lloyd fue el primer afroamericano en jugar en la NBA ya que jugó un día antes que sus compañeros. Fue el 31 de octubre de 1950. Lloyd sumó 6 puntos y tomó 10 rebotes en su debut.

Los tres forman parte de la historia, plantándole cara a los prejuicios del racismo y abriendo la puerta a que jugadores como Michael Jordan pudieran jugar en la mejor liga de baloncesto del mundo.

Lamentablemente, para Floyd, la temporada como novato le duró poco. Tan solo jugó 7 partidos como novato, porque fue llamado a filas por el ejército durante la Guerra de Corea. Volvió en 1952 y jugó para los Syracuse Nationals (hoy Philadelphia 76ers) quienes adquirieron sus derechos cuando los Capitols abandonaron la competencia. A partir de ahí, pasó seis temporadas con los Nationals, promediando 8,3 puntos, 6,6 rebotes y 1,5 asistencias por partido.

La mejor temporada de la carrera de Lloyd llegó en la 1954-1955. No solamente promedió máximas de carrera con 10,2 puntos, 7,7 rebotes y 2,1 asistencias, sino que ayudó a los Nationals a ganar el primer título en la historia de la franquicia. Él y su compañero Jim Tucker fueron los primeros afroamericanos en ganar un título NBA.

Lloyd pasó las últimas dos temporadas de su carrera jugando para los Detroit Pistons.

Racismo

Según el Washington Post de la época, Lloyd fue rápidamente aceptado por sus compañeros, pero aun así tuvo que convivir con el racismo muy arraigado en aquella época. Fue escupido por algunos fans e insultado por otros.  También le prohibieron la entrada en hoteles o restaurantes por el color de su piel.

Lloyd, lejos de frustrarse o deprimirse, usó ese odio y lo canalizó para mejorar.

"No puedes saltar a la tribuna y pelearte con los fans. Así que la única manera de hacerlos pagar, es que pierdan el partido", dijo alguna vez Lloyd.

"Mi filosofía es que, si no te estaban insultando, es que no estabas haciendo nada. Te asegurabas de que te insultaran, si podías. Porque si te insultaban, era que los estabas lastimando".


Post-NBA

Una vez se retiró como jugador, siguió haciendo historia. Lloyd fue contratado por los Pistons como asistente técnico en 1968. Allí hizo historia nuevamente, siendo el primer afroamericano en ocupar dicha posición.

Lloyd tomó el mando de los Pistons durante la temporada 1971-1972, aunque eso no le valió para ser el primer afroamericano en ocupar esa posición, ya que Bill Russell ya se había convertido en el primer afrodescendiente en entrenar a un equipo de la liga, a los Seattle SuperSonics (1973 – 1977). Aun así, Lloyd hizo historia nuevamente, esta vez transformándose en el segundo afroamericano en ser entrenador en la liga.

Como entrenador, Lloyd no tuvo tanto éxito. Fue despedido luego de iniciar la temporada 1972-1973 con récord de 2-5.

"Ser técnico solo es divertido si ganas", recordó Lloyd riendo. "Yo no gané. No fue divertido".

En el 2003 Lloyd ingresó al Salón de la Fama Naismith Memorial, como contribuyente junto a Robert Parish, James Worthy, Chick Hearn y otras leyendas.

"La habilidad de Lloyd de manejarse con gracia, estilo y profesionalismo, tanto adentro como afuera del campo, durante una era de segregación racial se transformó en un modelo a seguir por otro", dice su biografía en el Salón de la Fama.

Lloyd murió en 2015 a la edad de 86 años. Su legado nunca será (o no debería ser) olvidado.


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